sábado, febrero 25, 2006

ya tengo el pendrive (lo que no tengo es calma)

mi amigo Nadie le dio a leer mi blog a otros amigos, a pesar que le había pedido que no lo hiciera al darle el nombre del blog. me produce una sensación muy incómoda que otros me lean sin mi permiso, más encima con referencias personales incluídas (seguramente el Nadie traidor le contó más de mí que simplemente el hecho de tener yo un blog).
cambié el pendrive por uno que fuera pendrive y no sólo mp3. aún no voy a recuperar en los campos perdidos los archivos escritos en la casa de mi hermana. creo que deberé hacer un poco de trámite tecnológico antes... el PC de esa casa no tiene windows XP, hasta donde yo sé.
en fin, la tecnología de a poco se pone de mi lado. lo triste es que sigo necesitando un PC, y debo ir viendo cómo lo haré para escribir en los que me prestan...
estoy leyendo a jaime bayly, y me gusta su soltura. el vocabulario no es tanto mérito porque es peruano, pero la soltura, me gusta. también acabo de leer a schlink, el lector, y ese libro sí que me remeció. por varias razones, ligadas a becca, y también a mi vida personal, a los desencuentros con mi amante (o ex amante).
el nudo del libro tiene que ver con el encuentro que en Becca yo a toda costa esquivo (la Becca esquiva porque yo escribo que así es). y varias frases que simplemente son para el bronce, en especial aquella que dice que negar a alguien con quien tienes un lazo es traicionarlo (eso, con respecto al que me niega, mi ex-amante, el que me regaló el pendrive en reparación por su negación de mí).
odio que alguien me niegue, es algo insoportable. creo que por eso nunca voy a tener de amante a un casado, o a quien sea que necesite negarme para mantener el status quo de su vida en paz. en fin, mi último amante no es casado, pero para el caso da lo mismo, igual me niega.
lo siento, no quería hablar de mí, pero el libro de schlink me remeció en serio. lo del holocausto y las culpas en las generaciones alemanas, no sé. no me remeció tanto como el tema de cómo traicionamos o nos traicionan.
lean a schlink, el lector. vale la pena hacerlo. mezcla mucho en un libro tan chico, pero lo hace bien, bonito.
ya les cuento cómo voy.
Adeu

miércoles, febrero 15, 2006

falta poco para el pendrive (recibí un comentario desde México)

es curioso. recibí un comentario a mi blog. no de Nadie, ni de la Pom, ni de mi sobrina, ni de mi amante (que recién ayer se enteró de mi blog). es decir, el comentario viene de un perfecto desconocido y ocioso que no tengo la menor idea de cómo pero que se encontró con mi última entrada (odio la tecnología...).
el señor, que firma Paco, me dice cómo puedo publicar mi blog desde Gmail, y me da una serie de especificaciones técnicas de cómo hacerlo. le agradezco profundamente, señor Paco, mexicano. pero mi tema no es cómo hacerlo con el blog, el tema es cómo escribir una novela sólo en PCs prestados por unos ratos, o contratados por horas, cómo recuperar esa información, cómo tener toda mi novela junta frente a mí.
mi oficina es virtual, no tengo PC. y soy escritora, y no tengo PC. además este blog es secreto, no quiero que nadie lo visite, a menos que lo haga desde la libertad azarosa del ciber espacio, como sucedió con el señor Paco, quien amablemente me ayuda desde México, tierra tan bella. me refiero a que yo no lo voy a andar publicitando.
muchas gracias a Paco, que espero me vuelva a visitar, aunque sospecho que no gusta de la literatura precisamente.
en fin, mi amante me trajo un pendrive que no es tal y que debo devolver, boleta de por medio, a la multitienda respectiva para finalmente quedarme con un pendrive que sí sea tal.
y hay ciertas novedades por ahí, editoriales, pero me son secretas, me son calladas porque no quiero que nadie por ahora me acompañe en esta batalla. al menos no son para ponerlas en el blog.
mi amigo (que también escribe) Eo está o estaba en Baires, qué envidia. en Santiago de Chile el calor es insultante (dicen que en Baires es peor, la humedad...). y yo aún sin pendrive, mañana veo a mi testigo, y empiezo a escribir como una loca, en cuanto pueda (en cuanto me pasen un PC).
ya les cuento cómo voy.
Adeu

viernes, febrero 10, 2006

odio la tecnología, casi tanto más que ser pobre

joder. escribo mucho en otros PCs (de un tiempo a esta parte todos los PCs son "otros", desde que el mío expirara, hace meses), escribo embalada tres capítulos de Becca (que no se llamará Becca, si no que tendrá un nombre más novelesco, una expresión que se repite mucho a lo largo de la novela) y por la cresta, cuando lo voy a abrir desde disquete, la tontera de archivo no se abre.
el disquete se fregó. me ha pasado con ene disquetes, ene veces. muy pocos PCs a mi alcance tienen internet, que es mi solución ideal, porque recurro de inmediato a mi Gmail y ahí lo guardo todo sin sobresaltos. sólo la red no me ha fallado nunca, que hasta el CD se fregó la otra vez. me dicen mis amigos computines que la solución para rescatar la información de esos PCs amigos es el bendito (bendo bendito, vero verito) pendrive, pero, adivinen, no tengo un peso.
me dan ganas de hacer público este blog, contra todo mis principios, sólo para ver si alguien se conmueve y me regala el famoso pendrive. creo que no es ni caro, que el más barato (y que encaja con mis requerimientos) cuesta alrededor de 10 lucas, unos 15 euros a lo sumo (ustedes saben, todo lo mido en euros).
en fin, ya veré cómo rescato esos archivos de esos meandros perdidos de mi vida de escritora miserable. por ahora, tendré que seguir en abstracto, sin tener la información frente a mí, sin tener cómo volver a leer lo que ya escribí y no saber cómo juntarlo con lo que viene. todo lo junto en mi cabeza, nada más.
no importa, igual la novela va, la novela viene, y viene llena, llena de gente viva. escribo por la Becca, por el Alek, por la Amanda, por Gastón y por Rafa, escribo por todos ellos y también por mí, la Lupita (tuve la patudez de ponerme en mi propia novela como personaje, claro que muy marginal).
obviamente no me llamo Guadalupe, aunque qué mas quisiera yo que llevar un nombre mozárabe, más encima si significa río de cantos negros. el mío (mi nombre) viene del alemán y significa aparte de lo que significa en castellano, brillante. prefiero ser un río de cantos negros, un río rumoroso, espumoso, que desemboca en algún lugar de una España mirada por ojos moros, que "brillante".
de alguna manera soy un río, además. soy un torrente de palabras. un verdadero torrente de palabras que cuando llega, ay mi Dios, afírmense que me los llevo. a veces el río decrece, incluso mucho, unos pequeños riachuelos, unas pequeñas hebras de palabras, pareciera que me seco. pero luego vienen las lluvias, los gritos en la cabeza, y pum de nuevo desbordo y arraso con todo.
soy un río, un río de cantos negros como la tinta en que será impresa mi novela, un río que se desborda, a pesar de los disquetes, por sobre los disquetes, por sobre la ausencia de un PC propio, por sobre todo me desbordo, y llego al mar, a la orilla, y ahí por fin (acaso, en una de esas, así, por ser) descanso un poco.

jueves, febrero 09, 2006

porqué es secreto el blog

bueno, ya he dicho que yo escribo. y me preguntan de pronto algunos conocidos si no será peligroso que una escritora tenga un blog, como que es un riesgo constante de plagio o de algo parecido.
hum, pienso que no, contesto, porque yo escribo acá por el puro gusto de escribir, no más. de hecho creé el blog para eso: escribir acerca del escribir, lo que en mí es como un vicio, es como tomar té hablando de tomar té, bueno, no importa, yo me entiendo.
el blog hasta ahora es secreto, no tengo idea si alguien me ha leido o no, pero no lo creo, me refiero a los desconocidos. porque sólo se lo he dado a dos personas y que son justamente los nombrados acá: mi amigo Nadie, y mi amiga-ocho-de-febrero la Pom.
cometí el error de hablar de ello con otras personas que me lo han solicitado varias veces y yo por supuesto no se los he dado. lo hago porque he experimentado eso de la presión por seguir escribiendo, por el "X (casi pongo mi nombre), bonita, a ver si me mandas más de lo que escribes, que quiero saber cómo te las arreglas con tu novela" dicho por un amigo granadino, o este mismo granadino diciéndome que si he escrito o no, que cuántas páginas llevo, en fin, un interés demedido en eso, una presión insufrible cuando escribir era hacerlo en un PC cuyo teclado no escribía la A, ni la Z, ni borraba el delette, ni hacía un renglón el enter. para qué decir de cuando el PC definitivamente murió.
escribir a mano es tan casi imposible y sin embargo lo he hecho, angustiada y acorralada por la historia, en especial Becca, que hoy, 9 de febrero cumple un año desde que la estoy escribiendo. y ya falta tan re poco... hice una carta gantt (soy virgo, no lo puedo evitar) y pude mirar lo que me falta, tan poco, estoy tan cerca, tan cerca de la orilla. escribir y escribir a Becca ahora que la veo tan cerca del final, del orden final de esos archivos, escribir ya no 5 cinco páginas diarias sino de pronto 10 o 15 incluso, cada capítulo-archivo vertiginoso, porque ya sé lo que hay que poner (el trabajo de hamaca, Nadie, ¿lo ves ?), aunque luego no lo pueda sacar del PC porque la maldición de la disquetera una vez más... necesito un pendrive, me han dicho mi amigos computines, ufff pero si ni siquiera tengo para el cuaderno de lujo, que cuesta apenas 2,5 euros!
escribir sólo por el gusto de escribir acá ahora que mi cuaderno ya se acabó, hacer de esto mi cuaderno, y pasárselo sólo a gente muy muy escogida, bajo previo juramento de no pasarle el blog a nadie más, porque yo no busco acá ser leida, ya lo dije, acá escribo amparada en el anonimato.
ah, hay una tercera persona que sabe de este blog y cómo llegar a él sorteando los verde agua. se trata de mi sobrina, la única persona de mi familia que me conoce a fondo mi afán por escribir, incluso me ha leido a Becca a pesar de no ser tan adecuada para su edad. otro día hablo de ella y los hago reir hasta mearse con nuestras interacciones-en-inglés (the floor, poor thing!).
y hay un ofrecimiento para entrar a este blog a otra persona, mi testigo, una persona que me está ayudando a encontrar los equilibrios perdidos para pasar a ser una persona más adaptada. al menos, con pega, con sueldo (y del sueldo un PC, y del PC muchos cuentos y novelas). una persona que sin duda dará que hablar en estas páginas.
nueve de febrero. Becca ya termina. ya os aviso en qué voy de mi carta gantt de Becca.
Adeu.

domingo, febrero 05, 2006

mi amigo Nadie

a Nadie le conocí en un chilean chat. yo entré con un nick literario y él me lo cachó de inmediato, así que imagínense la buena onda. él también escribe. nuestra relación ("lo nuestro" como dice Nadie para luego arrugarse como un almeja sometida a la tortura del limón) ha estado marcada por sucesivos no admitir en el puto msn. Nadie bebe demasiado y cuando lo hace, le sale un lado oscuro espantoso, negro, lleno de dolor y de resentimiento. entonces no me queda otra que no admitirlo en msn, y listo. pero una y otra vez lo admito de nuevo. con Nadie como nunca antes he practicado la paciencia. el amor, creo. a Nadie le quiero mucho, porque cuando le conocí en persona, esperaba un sujeto maldito, uno más de esos kafkianos recalcitrantes que cree que creer es de idiotas, un ser espantoso y desagradable (pensé que vendría borracho, y aún así: cuando no está borracho en el msn siempre es más bien irónico, como si fuese sine qua non el ser irónico si escribes, como el Eoman ex-lone). pero le abrí la puerta a un ser dulce, tímido incluso, y tremendamente humano. cálido, tierno, inteligente. claro, la coraza de ser maldito era eso, una coraza.
Nadie me tiene un poco cansada de tanto que me admira. ha leído mucho de mí y de pronto reacciona con envidia, con una ponzoñosa envidia (en especial borracho), y otras con comentarios tremendamente halagadores, que, debo admitirlo, algo hacen en mí. creo que es mentira que otros te digan cosas lindas de ti y no te afecte. yo quedo con una sonrisa eterna en la cara después de escuchar a Nadie decir cosas de mi estilo, de mi manejo del idioma, de la historia.
Nadie, además, es tremendamente inteligente, tremendamente calculador de dimensiones (estudió arquitectura y se le nota), todo lo compara, todo lo calibra. y me da unas visiones de lo que yo escribo que por supuesto yo no sospecho cuando lo estoy escribiendo, por ejemplo, lo de las copas, y su significado de amor en el capítulo de Becca en que Gastón y Vicente tienen su vuelta al deseo mutuo... yo puse las copas porque hay copas en las mesas, pero jamás se me ocurrió eso.
ah, y por supuesto, Nadie escribe. le he leido algunas cosas, y yo diría que le falta paciencia y oficio más que lecturas. le falta dejar de pensar cada cosa que pone, y ponerla no más. el trabajo de hamaca lo ayuda, pero escribir de una vez lo hamacado sería ideal. no escribe mal, Nadie, a veces incluso escribe precioso. pero le falta algo que yo tengo, y en eso tiene razón. no me refiero al talento. me refiero a que yo me la creo, yo soy escritora, publique o no, yo soy escritora, me paguen o no por hacerlo, yo soy escritora, yo tengo oficio, me pongo metas de páginas diarias, escribo en las mismas horas casi siempre, ando con mi cuaderno y mis lápices siempre conmigo, mi CD y mi disquete, en fin, y ahora que todo lo guardo en el ciber espacio, pues ando con mi oficio a cuestas siempre.
eso es lo que me distingue de Nadie. él no se la cree aún. se la cree, pero quiere que sea fácil. que le sea fácil encontrarse su escondondrapio, que le sea fácil encontrar un motivo, un tema, una línea.
escribir es lo más fácil del mundo. consiste es poner en palabras lo que tenemos en la mente.
escribir bien es más complicado. consiste en, primero que nada, creerse el cuento de escribir, y hacerlo con humildad, con pasión, con dedicación verdadera.
eso es todo, Nadie, náufrago con hambre en la mirada, mi amigo, mi amor. eso es todo, y lo sabes.

queda tan poco para el ocho de febrero

el ocho de febrero no sólo es el cumpleaños de mi amiga la Pom, sino que además marca una fecha cabalística importante. el año pasado fue el turno de entre chicos, mi cuento ero gay que leyó Juan Carlos en el Naitún, me lo criticó y me pidió publicara. Juan murió un mes y medio después, y para siempre entre chicos ha de quedarle dedicado. la Pom está de cumpleaños, ya lo dije, y el año pasado llegué con entre chicos de regalo. este año ya está listo su regalo, o casi (la felicidad de los felices) esta vez no es ero, ni gay, pero sigue siendo un cuento de regalo.
supongo que la Pom se siente honrada de que yo le regale un cuento cada año (ella sabe que no puedo regalarle nada más por ahora). eso, lo supongo.
pero estuve pensando que, ya que la Pom tiene la mala costumbre de cumplir años el día cabalístico en que estreno cuento, o que saco una tirada de cuentos, quizá llegue un día en que junte todos los cuentos-ocho-de-febrero y los publique con el ingenioso nombre de para Pom, con amor en su cumpleaños...
no sería mala idea, pienso, después de todo.
en fin, el ocho de febrero también empiezo a despedirme de mi época de vaga, de escritora contra el mundo, de "no tengo trabajo, no gano dinero, sólo escribo, ¿y qué?". luego de un año de permitírmelo, ha llegado el plazo y me da un poco de pena, pero en fin, yo sabía que mis años rituales sirven para mucho, no sólo para darme un tiempo en relativa paz, sino, por sobre todo para sentir que cumplo conmigo misma, así como cumplo mis metas de una página diaria, o cinco diarias (depende del tema, depende si es la novela Becca o un cuento...)
y estoy como despidiéndome, vagando por santiago, aceptando invitaciones de desconocidos a beber cerveza en un parque público, yendo a la Biblioteca Nacional a bucear en los diccionarios del sector Referencia, en fin, hacer un homenaje de estos últimos días, antes de empezar a buscar trabajo en serio y dejarme de pavadas.
eso, en ningún caso implica dejar de escribir, si no escribo me muero, literalmente, los gritos en la cabeza me resultan insoportables, la boca se me llena de palabras, (como a quien se le llena la boca de sangre). he de seguir fiel a lo único que me ha sido siempre fiel, sólo que tendré que hacerlo en los horarios que me sobren, que rescate de mi vida de madre y escritora (como la Becca, como la Becca).
así que feliz cumpleaños Pom, in memoriam, Juan Carlos, y adeu a mi año, mi año en que sólo escribí (pero qué manera de escribir).
salud!